Monday, May 26, 2008

UNA REPUDIABLE VICE CONSUL CUBANA EN LAS PALMAS: ELISA MARTINEZ MARTINEZ

Ramón Muñoz Yanes hace 10 largos años que el gobierno le niega la entrada a Cuba para ver a sus hijos, su esposa y su familia

Un valiente, talentoso y querido amigo Ramón Muñoz Yanes (Porfin Libre) vive en Las Palmas, Gran Canaria hace 10 años en los cuales el gobierno cubano le ha negado la entrada a Cuba para ver a su esposa e hijos.

La Cara de la Represión que le niega a Ramon la Entrada Cuba

El rostro grisoso que le dice NO "no puedes entrar al país que naciste" es la Vicecónsul Cubana Elisa Martínez Martínez quien entusiastamente, moviendo la colita y siendo una buena mascota entrenada del régimen cubano le ha dicho con gran satisfacción en su rostro a Ramón que no puede ir a Cuba y abrazar a sus hijos.

Es importante que Elisa comprenda que hay una ley universal que nunca falla y dice que lo que se hace se paga. Poco tiempo le queda al régimen y cuando eso suceda quizás Raúl Castro y su familia tengan a donde escapar, pues para ello bastante dinero robaron a costa del pueblo cubano, pero los Castricos y las Elisa Martínez Martínez no tendrán a donde ir. Tendrán que dar cuentas en una Cuba libre a la justicia y sino a los cubanos por sus arbitrariedades.

Este mundo es muy pequeño y que sepan los que cometen arbitrariedades en Cuba, los contribuyen a violar los derechos humanos del pueblo, que se sabe quienes son y donde viven.

Un día, que estoy seguro esta muy cerca, estos personajillos sombríos, tendrán que rendir cuenta no solo a la justicia sino a sus propios hijos y les tendrán que mirar a la cara y decirles: Hoy el pueblo cubano me acusa porque un día fui cómplice de una tiranía y entusiasta y concientemente actué con toda maldad para violar los derechos humanos, dividir familias y causarle daño a mi gente.

Hay un precepto universal en el que creen católicos, cristianos, budistas y muchas otras religiones en diferentes maneras pero siempre concluyendo que: "quien la hace la paga."


Datos Personales de Elisa Martinez Martinez - Viceconsul del gobierno Cubano en Las Plamas, Gran Canaria


Elisa Martinez Martinez es la quinta (gordeja bajita) de derecha a izquierda.


Foto es Elisa Martinez Martinez Viceconsul Cubana en las Palmas.

Consulado del Régimen Cubano en Las Palmas, Gran Canaria

Dirección: Calle León y Castillo No. 247, Ciudad Jardín, CP.35005, Las Palmas de Gran Canaria
Teléfono: (34-928) 24 4642
Fax: (34-928) 24 4643
E-mail: consuman@terra.es
Horario de atención: Lunes a Jueves, 9:00-13:30
Funcionarios:
Sr. Perfecto Julio Alvarez Dorta, Cónsul General
Sra. Elisa Martínez Martínez, Vicecónsul

La única Elisa Martinez Martinez listada en el Directorio Telefonico de Ciudad de la Habana. Etecsa, 2003, p. 443.

Calle 19. No 257. Vedado
Ciudad Habana, Cuba
Telefono 832 0348

Elisa frecuenta el restaurante 'Habana Vieja' del pueblo 'Vecindario' en el Municipio de Santa Lucia de Tirajana en Las Palmas, Gran Canaria con su esposo y sus dos hijos. Ahi nuestro amigo Ramon se la encontró y ocurrió la siguiente historia contada por Ramon/Porfin. Los dueños del restaurante Habana Vieja acostumbran a hacerle pleitecias y reverencias a los representantes del regimen cubano.

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Mi identidad, una ofrenda a mi propia libertad.
Ramón Muñoz Yanes/
Porfin libre en Redcubana y Secretos Cuba
Fuente: Post 'Mi Identidad, Mi Ofrenda a la Libertad en Red Cubana

No puedo por un problema moral, sencillamente por una cuestión de dignidad mantener oculta mi identidad. Soy un hombre libre. Quizás por esa falsa idea de que obtendremos algo a cambio de no luchar, quizás porque eso que pretendemos es que no tomen represalias en Cuba con nuestras familias le hacemos el juego al tirano.
En la tarde de hoy, almorzaba en un restaurante cubano en Vecindario, Santa Lucía. Eran las dos de la tarde y veo entrar al restaurante a una señora obesa, mulata, con su esposo y dos jovencillos que la parecer eran los hijos. Cual no sería mi sorpresa al reconocer a la vicecónsul cubana de Las Palmas de Gran Canaria. De inmediato la dueña del restaurante en un acto de distinción con la funcionaria cubana se sentó a su mesa y comenzaron una animada conversación. La mismísima señora que me miró hace un año con rostro desafiante y me reiteró la negativa a mi posibilidad de entrar en Cuba con el objetivo de ver a mis hijos. La negativa fue comunicada con satisfación en el rostro, con esa mirada de quien sentencia a quien ha dejado su Patria con el único afán de ser libre.
Ahí estaba, a unos pasos de mí, con su familia disfrutando de una cena cuyo coste promedio para una familia es de sesenta euros, mientras los niños de mi Patria son vetados a un litro de leche al alcanzar los siete años, donde mi abuelo pasó los últimos años de su existencia tomando una leche en polvo comprada en el mercado negro ligada con maicena. Ahí, a unos pasos de mí estaba la funcionaria de la dictadura y no pude más.
Me levanté y avancé hasta el centro del restaurante. Me dirigí a los presentes:

- Cubanos presentes, hace diez años el gobierno cubano me impide la entrada a mi Patria y a contemplar el rostro de mi familia. Quienes puedan almorzar en silencio en cercanía de los representantes de la ignominia, quienes puedan permitir que quienes nos arrebatan la libertad convivan a su lado que lo hagan pero deben saber que no es propio de hombres dignos, por respeto al pueblo de Cuba, por respeto a mi propia familia no puedo hacerlo.
Pero que al menos esta noche estos señores le expliquen a sus hijos bajo que motivos se separa a tanta y tanta familia cubana, bajo que razón humana se destroza a tantas familias. Para que estos mismos padres le expliquen a sus hijos como es posible que ellos sean el instrumento de tan viles patrañas contra su propio pueblo.
¿Qué quieren?, ¿Vernos de rodillas?- me arrodillé- Pues expliquenle también a sus hijos que la libertad, la dignidad y la hombría aun de rodillas sobrepasan en tamaño moral a quienes oprimen a Cuba.
¡Viva Cuba Libre!
¡Abajo la dictadura!

Acto seguido me retiré del sitio. A continuación los músicos y algunos presentes salieron y me abrazaron aprobando mis palabras. Como no tiene sentido una identidad falsa porque ya se ha convertido en una muestra de debilidad para conmigo mismo, aquí les hago conocer mi identidad real a mis hermanos de Foros Cubanos,Porfin Libre González tiene un rostro real y para los cubanos al servicio de la dictadura castrista que soy un hombre libre, sin Patria pero sin amo y que no descansaré hasta que mi Cuba sea libre.

Ramón Muñoz Yanes, es mi nombre. Aquí me tienen, a pecho descubierto. Ahora cuando quieran atacarme, ya saben quien soy pero que estén concientes que mi mano no temblará porque está en ella mi corazón de cubano.

¡ABAJO FIDEL!
¡LIBERTDAD PARA LOS PRESOS POLÍTICOS!

El verbo es un arma temida por los tiranos

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