Por El Compañero
Miércoles, 3 de noviembre del 2010
En el imaginario popular cubano a Biscet se asocia con Maceo y se le hace el digno reconocimiento simbólico de ser el Titán de Bronce de la Oposición Cubana. Mucho se admira a Biscet por sus acciones, pero si bien este reconocimiento es importante también lo es detenerse y analizar sus ideas y perspectivas. ¿Qué tipo de ser humano es el Dr. Oscar Elias Biscet? ¿Qué ideas propone para Cuba? ¿Qué tipo de sociedad desea Biscet? ¿Por qué lucha? ¿Cuáles son las influencias que enriquecen su pensamiento? ¿A que esta dispuesto Biscet para lograr sus metas?
El pensamiento político de Biscet esta estrechamente vinculado con los valores Cristianos que nutren sus ideas. Biscet trasciende la teoría, su trayectoria demuestra que en su persona conviven palabra y acción. Ante todo Biscet es un hombre moral, un ser humano ético e integro. No se puede desligar a Biscet de los valores que nutren sus ideas. Sin valores no existiera el Biscet que conocemos. Son estos los valores que han estado detrás del ideal y las acciones de los luchadores por la libertad en Cuba. Resultaría imposible trascender de la inacción a la rebeldía, morir por la libertad en el paredón al grito de ‘Viva Cuba Libre, Viva Cristo Rey’ como hicieron los cubanos en el presidio político histórico en la década de los 60 o como hacen hoy día sus sucesores en la oposición pacífica al estar dispuestos a aceptar como Biscet las consecuencias de largo confinamiento en prisión que trae una vida en la resistencia. En Biscet habita la grandeza de los que perdonan, de los que no profesan odio siquiera hacia sus verdugos. Eso no lo dice el teórico que nunca vivió los horrores del presidio, lo dice Biscet el preso político, lo dice el prisionero de la celda 1232 del Combinado del Este, lo dice el que ha presenciado toda la oscuridad y crueldad humana, lo dice el que como Martí entiende mejor que nadie lo que significa el “dolor del presidio, el mas rudo, el mas devastador de los dolores, el que mata la inteligencia, y seca el alma y deja huellas que no se borraran jamás.” Inspira y motiva quien perdona. Nos hace recordar la fuerza espiritual de quien se alza por encima de sus propias circunstancias.
Fueron las ideas cristianas las que dieron vida al pensamiento y las acciones de Biscet. Fue el poder de la palabra lo que hizo de aquel médico especialista en medicina interna se convirtiera en un opositor político. No podemos olvidar ese sentido cristiano de alzar una voz, expresar la verdad, defender la vida y de expresar una idea sin importar las consecuencias de la misma incluso cuando ello trae represalias directas a todos los que alzan su frente e irritan al poder. Fueron estos valores cristianos los que motivaron a Biscet a incursionar en la oposición política y convertir al desconocido especialista en medicina interna en la voz más poderosa de una generación de opositores. Fue esencialmente un acto movido por ideas cristianas de denunciar la práctica del aborto en Cuba y motivar a sus colegas a unirse a tal llamado lo que llevo a Biscet y su esposa Elsa a ser expulsados de su hogar en Febrero de 1998 y de que le fuera prohibido ejercer como medico en Cuba. En resumen cuando leemos cuidadosamente las palabras de Biscet encontramos un común denominador en referencias e invocaciones a Dios, en el poder de la oración y en las ideas expresadas en la Biblia. Biscet reencarna místicamente aquel sentido del martiricidio que motivó a los primeros Cristianos sometidos a la mas cruel persecución a morir por su verdad.
Cristianismo se une con Cubania para influir sobre un Biscet que evoca ante todo la idea del sacrificio por la patria y la libertad. Las letras de nuestro himno nacional impulsan a morir por la patria como virtud, la Biblia impulsa a una vida de sacrificio por Dios, ambas cosas son parte de Biscet. Esa noble y valiente idea de que un patriota muere por la libertad que enarboló Marti con su vida y su muerte y que también fue inspiración del fundador del Directorio Revolucionario y líder de la Federación Estudiantil Universitaria José Antonio Echeverría al inmolarse en una acción para derrocar la dictadura de Batista son aspectos que cobran vida nuevamente en la figura del Biscet que ha estado preso mas de 26 veces y que en su ultima condena fue sentenciado por el régimen Castrista a 25 años de prisión. Todo este sentido de sacrificio máximo se puede ver claro en frases que evocan un sentido muy alto del deber que asume ir a prisión mientras exista injusticia: “Cuando un gobierno encarcela injustamente a sus propios ciudadanos el deber de un hombre justo es la cárcel” o cuando Biscet expresa su voluntad a continuar resistiendo desde “la celda oscura” donde lo obligan a estar confinado.
Biscet es ante todo un hombre de acción como lo mismo fue en su Echevarría. A Biscet lo distingue más la acción que cualquier trabajo ensayístico de ideas. La trayectoria de Biscet es la demostración viviente de la idea Martiana de que “hacer es la mejor manera de decir.” Como a Echevarría en su tiempo en Biscet uno quizás pueda distinguir su pensamiento al compilar sus intervenciones, entrevistas y alocuciones públicas pero en ambos la característica fundamental es la de poner en practica ideas mediante la acción. En Biscet esto se ha manifestado mediante incontables marchas y demostraciones públicas apelando a la desobediencia civil pacifica con fuerte influencia en el estilo de lucha de Ghandi y Martin Luther King. Para Biscet y en esto me identifica profundamente con su lucha.: “el poder no concede nada sin una exigencia” con lo cual nos esta ratificando su condición de hombre de acción y de recordándonos a todos los cubanos que solo resistencia y la presión llevaran al cambio en Cuba.
En Biscet como en los jóvenes del centenario en la década de los 50 hay un fuerte sentido de pertenencia a una generación desengañada. En la era republicana las causas fueron las de una democracia disfuncional, en la era Castrista los orígenes se vinculan a una revolución timadora de sueños y esperanzas. Biscet es el ‘Hombre Nuevo’ verdaderamente progresista, no la mutación ideológica en la que pensó el Che Guevara, sino el verdadero hombre que alza la voz contra la injusticia, que confronta cualquier poder establecido y que no se conforma hasta no ser libre.
La democracia y el respeto a los derechos humanos forman parte esencial de los ideales de Biscet y su deseo para Cuba. Biscet cree en el estado de derecho y en la división de poderes con la que se constituye cualquier democracia moderna cuando expresa que al gobierno hay que ponerle limites en su poder. Es seguidor de los derechos humanos como la ideología que debe definir toda nación moderna y civilizada. Fue en aras de la causa de los derechos del hombre que todos recordamos el grito: ‘Y Que Vivan los Derechos Humanos! Como sus predecesores en la lucha de resistencia contra la opresión en Cuba, Biscet esta movido por un fuerte rechazo hacia las tiranías y hacia el comunismo, especialmente por el poder destructor de ambos y no se deja confundir por el disfraz que adoptan las “revoluciones” cuando expresa “La tiranía es tiranía, venga de donde venga.”
En conclusión, los aspectos referidos aquí son una valoración parcial y resumida de los puntos más esenciales que se reiteran una y otra vez en el pensamiento de Biscet. Motivo a los amigos foristas a profundizar mas en el pensamiento de Biscet através de sus escritos, denuncias, entrevistas y alocuciones. El pensamiento de Biscet por lo tanto lo distingo como heterogéneo y nutrido de varias corrientes de ideas cubanas y globales En Biscet se reúne esa tradición cubanísima de inmolación por la patria, legado del sentimiento de sacrificio de patriotas como Martí, Maceo y otros referentes de nuestra identidad nacional. Hay cosas muy cubanas en el Biscet que grita “Que Vivan los Derechos Humanos” que ratifican ese valor que tanto admiramos y legitimamos en todo el que resiste ante la opresión. Biscet es un demócrata-cristiano. Cree en una sociedad movida por valores y principios, defiende el estado de derecho y la división de poderes, apoya la lucha de resistencia y desobediencia civil pacifica y cree junto al Cristianismo en los derechos humanos como pilar de una sociedad moderna. Biscet es la anatema del adoctrinamiento y de todo lo que ha querido fabricar el régimen cubano. A diferencia de muchos de sus contemporáneos Biscet es un hombre arraigado en fuertes valores y principios. Es todo lo opuesto al ser vacío y apático resultado de medio siglo de ingeniería en adoctrinamiento masivo en Cuba. Biscet pudo haber canalizado las energías de su vida personal, en dedicarse a la familia y a su profesión pero eso resulta imposible para los que trascienden de la mediocridad cotidiana y siente un llamado más poderoso que ellos mismos. Biscet no se conforma, no se doblega, no teme, levanta su frente, actúa como los dignos, para el la vida no es otra que el sacrificio en aras de la justicia y la libertad.
El Blog de Elsa Morejón, esposa del Dr. Biscet.
El Blog de Winnie Biscet, hija del Dr. Biscet.
José Martí, El Presidio Político en Cuba
José Antonio Echevarría, Testamento Político
Pensamiento y Biografía de Oscar Elias Biscet en http://www.free-biscet.org/ (Esta fue su pagina web inicial y dejó de existir hace un tiempo.)
Fundación Lawton de Derechos Humanos: Sitio Oficial del Dr. Biscet
Derechos de Copia del Blog del Compañero. Agradezco que toda referencia a este escrito incluya su autor 'El Compañero' y una cita a este Blog: http://politicacubana.blogspot.com/2010/11/biscet-y-su-pensamiento_04.html
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